Nicolás Jarry (94° del ranking ATP) parece no tener techo al demostrar cada vez un notable crecimiento en su tenis. Ahora, el chileno consiguió su primer triunfo en un ATP 500 al debutar con una gran victoria en Río de Janeiro y tan sólo dos semanas después de alcanzar por primera vez en su carrera los cuartos en un ATP 250 (Quito, Ecuador).
El “Príncipe” derrotó este lunes al experimentado español Guillermo García-López (67° del orbe y quien llegó a ser 23 en 2011) por parciales de 6-3 y 7-6 (3), siendo la mejor victoria de su trayectoria y la cuarta sobre un top 100, después de ganar el 2014 a Horacio Zeballos (98°) en el Challenger de Cali, el 2015 a Paul-Henri Mathieu (91°) en la qualy de Sydney y el 2017 a Jordan Thompson (67°) en el Challenger de Morelos.
El nieto de Jaime Fillol se mostró bastante agresivo con potentes derechazos y quebró en el octavo juego para quedarse con la primera manga. En tanto, en el segundo capítulo salvó tres set points en el décimo game y todo se definió en un tie-break, donde el nacional estuvo más certero.
Con esto, el criollo sumó su primera victoria en un ATP 500 y en Río, pues el 2016 cayó en el certamen brasileño ante el español David Ferrer, seis del planeta en ese entonces, por un estrecho 6-3 y 7-6 (3).
Ahora Jarry buscará seguir haciendo historia en los octavos de final frente al ganador de la llave entre el español Albert Ramos Viñolas (19°), cuarto favorito, y el local Rogerio Dutra Silva (106°).
Consignar que el chileno ingresó directo al cuadro principal de Río a última hora, tras la baja del italiano Paolo Lorenzi y evitó tener que disputar las clasificaciones.