Si bien la mayoría de las ligas en Sudamérica están suspendidas a causa de la rápida expansión del coronavirus o Covid-19, de manera increíble la Primera B no paralizó sus actividades y en los últimos días se jugaron tres partidos.
Uno de ellos fue el que animaron Unión San Felipe y Deportes Santa Cruz en el Valle del Aconcagua (1-1). Hace algunos días el Presidente Sebastián Piñera decretó la Fase 4 de la pandemia y redujo la asistencia de público a los eventos masivos de 200 a 50 personas.
Si bien no habían espectadores en las tribunas, el número se sobrepasó si se consideran los 18 jugadores por equipos, los integrantes de ambos cuerpos técnicos, árbitros y personal relacionado a la transmisión televisiva. Así las cosas, se jugó igual.
Osvaldo Hurtado, entrenador del elenco de la Región de O’Higgins, no escondió su malestar por la realización del encuentro en medio de la emergencia sanitaria. “A mí me gusta jugar siempre, pero lo ideal era suspender la fecha completa. Pero como acá nos gusta ‘para qué hacerla bien si la podemos hacer más o menos‘”, dijo en diálogo con Deportes en Agricultura.
“Como no había ninguna orden (de la ANFP), uno se tenía que presentar. Era bien complejo el tema, y con lo feo que era jugar sin público“, complementó “Arica”, quien también elogió a Humberto Suazo (revisa la otra parte aquí).