A Colo-Colo solo le bastó un tiempo para quedarse con un nuevo Superclásico del fútbol chileno. Los albos vencieron de forma contundente por 4 a 1 a la Universidad de Chile y extendieron a 21 años el invicto en el Monumental.
Tromba colocolina
Los albos tuvieron unos primeros 15 minutos perfectos en Macul, donde se encontraron rápidamente con tres goles. El primero fue un autogol de Bastián Tapia luego de un centro potente de Gabriel Suazo que batió a Hernán Galíndez. Eso fue a los 9 minutos, pero a continuación, tres minutos más tarde, una contra letal liderada por Pablo Solari, terminó en gol de Gabriel Costa. El trasandino con la intención de mandar un centro de tres cuarto de cancha, pone una pelota en el palo que descoloca a Galíndez y Costa finiquita de buena manera. Pero eso no fue todo, ya que otros tres minutos más tarde, Esteban Pavez colgó una pelota al ángulo para encaminar un rotundo triunfo de los albos en Macul.
La U parecía dormida. Los azules no podían encontrar el balón, ni menos las situaciones de gol. Era un verdadero monólogo de los colocolinos que cada vez que enfrentan a este rival en el Monumental se transforman, dejando atrás cualquier manto de duda que se impone.
No obstante, tras el tercer gol de los albos, la U tuvo la oportunidad de acortar distancias de forma inmediata, pero Cristián Palacios erró en doble oportunidad. Primero, tapó el lanzamiento Brayan Cortés, pero Roberto Tobar lo hizo repetir por adelantamiento del arquero de Colo-Colo. Pero el resultado no cambió, ya que Palacios mandó el tiro al palo. De esta manera y con la posibilidad de ampliar aún más el marcador por parte del equipo de Gustavo Quinteros, se fueron a camarines con un 3 a 0.
Un trámite en el segundo tiempo
El complemento comenzó con la misma dinámica. Los cambios no hicieron despertar al equipo de Santiago Escobar, quien se mostraba abatido y sin reacción. De hecho, Colo-Colo pudo seguir aumentando el marcador y lo logró al minuto 55 del partido, cuando Costas consolidó su doblete luego de una gran jugada colectiva del Cacique y asistencia en la previa de Juan Martín Lucero, a quien le anularon un gol por posición de adelanto.
Finalmente, a los 71 minutos vino una pequeña alegría para los azules y la revancha para Palacios, quien anotó desde los doce pasos, luego del cobro de Tobar por un empujón a Ronnie Fernández en el área colocolina.
Sobre el final, los azules sufrieron la expulsión de Camilo Moya luego de un feo planchazo contra Marcos Bolados (82′) y luego la de Bastián Tapia, luego de un agarrón, como último recurso, sobre el mismo Bolados (93′).
De esta forma, los albos se volvieron a imponer en Macul ante su archirrival, el triunfo 88 de 191 jugados, además de ampliar su ventaja a 21 años sin perder en el Monumental. Pero más allá de los números el equipo de Gustavo Quinteros agarra confianza pra revertir el discreto inicio de torneo.
Por su parte, los azules siguen en una profunda crisis futbolística. Más allá de una nueva derrota y lo amplio del marcador, el cuadro de Escobar no logra tomar un funcionamiento que por lo menos de confianza a sus hinchas para poder revertir el momento. De hecho, la U ya suma tres derrotas consecutivas en el torneo nacional, lo que comienza a atraer los fantasmas del años pasado, donde pelearon el descenso.