El serbio Novak Djokovic quedó ad portas de hacer historia. El número uno del mundo tenía la opción de convertirse en el tenista más ganador de la historia (superando a Roger Federer y Rafael Nadal) y quedarse con los cuatro Grand Slam de la temporada, hito que nadie consigue hace 52 años.
Sin embargo, cayó inapelablemente por un triple 4-6 en la final del US Open ante el ruso Daniil Medvedev, quien conquistó su primer Grand Slam.
Una vez terminado el partido, Djokovic aceptó la derrota y felicitó a su rival. Aunque antes había vivido un momento de furia. En el segundo set, ante la impotencia de no lograr un quiebre, el serbio rompió su raqueta contra el piso.
Aunque la imagen que conmovió a sus fanáticos llegó sobre el final, cuando el tenista de 34 años rompió en llanto previo a perder la final.
Uno de los momentos de la tarde: Djokovic llorando en el 4-5 y recibiendo, quizás por primera vez, el cariño unánime del Arthur Ashe.
Estuvo muy cerca, cerquísima. Que este resultado no empañe lo que ha hecho este año.
— Set Tenis (@settenisok) September 12, 2021