El conflicto entre Rusia y Ucrania no cesa. Ya son más de tres semanas desde la invasión de los rusos a territorio ucraniano, el cual ha dejado un sinfín de muertos. Además, ha generado que diversos ciudadanos dejen de lado la cotidianeidad y se unan a la guerra. Es el caso de Alex Dolgopolov, ex tenista ucraniano que dejó sus raquetas de lado y tomó un chaleco antibalas, un fusil y un casco para luchar por su nación.
Así lo mostró en una de las tantas imágenes que ha compartido en las redes sociales, la cual aparecen todos estos implementos de guerra, acompañado de la frase: “Antes eran raquetas y cuerdas, ahora esto…”, junto a unos emojis de la bandera de Ucrania.
Used to be rackets and strings, now this????? pic.twitter.com/hdYjMDlMuo
— Alex Dolgopolov (@TheDolgo) March 16, 2022
El ex número 13 del mundo nació hace 33 años en Ucrania, donde vivía hasta hace unos meses juto a su madre y hermana, específicamente en la capital Kiev, el principal objetivo ruso. Al enterarse, semanas antes de la invasión, de las intenciones de Putin, decidió emigrar junto a su familia a Turquía, donde se encuentran hasta hoy, aunque sin el ex tenista.
“Después de mucha información de las mejores agencias de inteligencia del mundo y la incredulidad masiva en casa, entendí que existía la posibilidad de una gran guerra con ataques en Kiev y en todo el país”, confesó.
Tras los primeros días del enfrentamiento, el ex tenista ucraniano, que participó de la última versión del desaparecido ATP de Viña del Mar en 2014, decidió hacerse partícipe del conflicto. En un principio, lo hizo apoyando y reuniendo dinero para el ejército de su país natal. Sin embargo, días después tomó la decisión de unirse a la guerra y comenzó a prepararse.
“En ese momento, ya comencé a practicar tiro, y tuve mucha suerte de que un exsoldado profesional me enseñó durante 5-7 días. Estaban muy felices de ayudar, una vez que escucharon mi objetivo. Muchas gracias a nuestros amigos turcos”, detalló en su cuenta de Instagram.
Asimismo, el ex tenista presumió sus progresos en su cuenta de Instagram: “No soy Rambo en una semana, pero estoy bastante cómodo con las armas y puedo golpear la cabeza tres de cada cinco veces, desde 25 metros en un ambiente tranquilo y de práctica”, destacó.
Por otro lado, Dolgopolov señaló que se unió a un grupo de combatientes estadounidenses que iban también a unirse a la guerra y cómo ingresó a Ucrania. “Tomé algunos chalecos antibalas para nosotros y nuestro ejército, volé a Zagreb, compré todo lo que necesitábamos, más monoculares térmicos y otras cosas, conduje por Europa, entré en Ucrania desde Polonia y, por fin, estoy en Kiev”, relató. Y agregó “¡Este es mi hogar y lo defenderemos! ¡Con toda la gente que se quedó!”.
Finalmente, agradeció el apoyo y destacó la unión de su nación en este complicado momento: “Me enorgullece lo unido que está el país, bajo tanta presión de un dictador loco. ¡La verdad está detrás de nosotros y esta es nuestra tierra! Me quedaré en Kiev hasta nuestra victoria y después. Gloria a Ucrania”, finalizó.