Según la consultora Plusmining, Minera Escondida llegaría a perder US$ 690 millones por la paralización de 30 días, aprobada el pasado miércoles por 84% de los trabajadores.
La cifra causa preocupación en el Gobierno por el impacto para la economía chilena, por lo cual apelan a llegar a un acuerdo.
Al respecto el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, señaló para La Tercera, que espera “las instancias se agoten para que se encuentre una solución (…) que haya una mediación exitosa para evitar la huelga”.
Por su parte, el sindicato Nº 1 de trabajadores continúa esperando una señal de flexibilización de la compañía. Afirmaron que estarán dispuestos a conversar hasta el lunes 6 de agosto.
Sin embargo, la empresa sostiene que la última oferta presentada, que incluye bonos por $18 millones, es el mejor esfuerzo que pueden hacer.
Invitaron a los trabajadores a reflexionar sobre las consecuencias de la huelga, pues aseguran que la propuesta se mantendrá hasta el 5 de agosto, y “posterior a esa fecha se perderán los beneficios de $2 millones por firma de contrato, de $1,5 millón por compensación del préstamo habitacional, ademas de la condonación de intereses a quienes tienen el beneficio habitacional vigente y las 500 UF($13,6 millones) de préstamo de libre disposición para los que no cuentan con él”, afirmó a La Tercera el vicepresidente de Asuntos Corporativos y vocero de Minera Escondida, Patricio Vilaplana.