La Asociación de Exportadores de Frutas de Chiles (Asoex) proyectó hasta en US$100 millones la pérdida de ingresos por la dificultad de ingresar contenedores chilenos a China, debido a las consecuencias del conavirus en el mercado.
“De mantener la actual tendencia se podría proyectar menores ingresos para el sector exportador de cerezas entre los US$70 y US$80 millones. Y si sumamos otras especies podríamos llegar a cerca de US$100 millones“, dijeron desde el gremio. Sin embargo, postularon, esto podría cambiar dependiendo de la evolución de la situación.
Durante las primeras 48 horas de las operaciones de los mercados mayoristas, tras el año nuevo chino, “se han logrado vender 249 contenedores del stock de fruta existente en la cadena, cuyo total se estima en 1.500 contenedores de cerezas”, señaló Asoex.
“En las primeras ventas los precios han estado menores lo esperado y a los valores alcanzados antes del año nuevo chino”, agregaron.
Además, agregaron que “existe preocupación por la fruta en tránsito a China la cual se estima en 1.600 contenedores, cuyas fechas de arribo se producirán entre la actual semana y la del 15 de marzo”. Estos fueros desglosados en 59 contenedores de arándanos, 173 de cerezas, 872 de ciruelas, 387 de nectarines, 30 de paltas y 134 de uva de mesa.
Una de las alternativas que barajan es “el desvío de fruta a otros mercados de Asia, o inclusive, dentro de China”, aunque sostienen que aún son pocos los casos que se están gestionando, “pero se está trabajando para agilizar este proceso para la fruta afectada por esta contingencia”.
De acuerdo al gremio La actual situación de los puertos Shanghái y Tianjin siguen congestionados, “pero el problema no es causado ni por la aduana, ni por el puerto. El problema es la gran cantidad de contenedores de carne congelada que se han acumulado durante los últimos 3 a 4 meses y que se han acaparado los enchufes disponibles para conectar los contenedores de frutas y así mantener sus condiciones de frío”.
Destacan que “hay algunas variedades de cereza, como ‘Regina’, las que no permiten un largo almacenaje por lo que su condición de venta podría ser afectada negativamente”.
En el documento que, gracias a la embajada en China, los plazos de internación han disminuido de 2 a 3 días a 24 horas de arribada la carga, “junto con permitir el ingreso de dos contenedores con una copia del certificado fitosanitarios, sin esperar el arribo de los originales”.