En el marco de la COP26, realizada en Glasgow, Escocia, se discutió la importancia del manejo sustentable de los suelos para poder mitigar los efectos del cambio climático que tanto daño está generando en el mundo, tema que abordamos en El Agro junto a Hernán Chiriboga, representante en Chile del IICA (Instituto Interamericano para la Cooperación Agrícola).
Chiriboga fue bien claro al respecto: “En suelos de calidad, hay calidad de vida”, declaró. Y fue más allá, pues señaló que “los suelos van mucho más allá de producir forraje o alimentos, son un servicio ecosistémico, son el principal reservorio de carbono orgánico del planeta”.
Y agregó que “cuando hacemos practicas no adecuadas, ese carbono se libera en forma de CO2 a la atmósfera, y se producen todos los efectos negativos que conocemos del cambio climático”.
Mayor concientización
Para Chiriboga, todavía falta generar mayor conciencia en las personas, especialmente en quienes trabajan la tierra.
“En Chile se hacen esfuerzos importantes, pero en América Latina y el Caribe, sobre todo, falta conciencia ambiental para saber que esos servicios ecosistémicos que dan los suelos nos ayudan a tener un mejor clima y mejores condiciones de vida y productividad”.
En este sentido, el representante del IICA en nuestro país manifestó que esto pasa más por un esfuerzo colectivo. “Es una cuestión de liderazgos, tanto regionales como nacionales. Solo una suma de esfuerzos puede lograr estos cambios porque son cambios grandes de políticas públicas importantes, que se están dando lamentablemente no a la velocidad que nos gustaría, pero se están dando”, señaló.
Suelos vivos
En abril de este año, Chile se incorporó al programa Suelos Vivos de las Américas, que lleva a cabo el IICA, una ambiciosa iniciativa internacional que actuará como puente entre la ciencia, el ámbito de las políticas públicas y el trabajo de desarrollo en la restauración de la salud del suelo en las Américas.
“Este es un esfuerzo junto con el SAG, el Ministerio de Agricultura, y en el que también participan Indap y Odepa, para demostrar que son medidas que pueden hacer una diferencia. Implementaremos medidas, como incrementos de la materia orgánica en los suelos, sistemas de labranza directa, zanjas de infiltración”, indicó Chiriboga.
Este programa ya se está iniciando en nuestro país, en el sector del secano costero, específicamente en Marchigue, Región de O’Higgins, y cuyo lanzamiento será el 3 de diciembre, junto a uno de los líderes de la iniciativa, Rattan Lal, experto en suelos y Premio Nobel de La Paz.