Chinches
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n Lirquén volvieron a interceptarse los de manchas amarillas, y en San Vicente, por primera vez, los de manchas mármoles. “Ambas especies califican como plagas cuarentenarias, por el daño que causan a la agricultura y el sector forestal”, explicó el Servicio.
El Servicio Agrícola y Ganadero confirmó dos intercepciones de plagas cuarentenarias en el Biobío, en los puertos de Lirquén (Penco) y San Vicente (Talcahuano): se trata de chinches apestosos de manchas amarillas y manchas mármoles.
“En el Puerto de Lirquén se pudo determinar la intercepción de erthesina fullo, que es el chinche apestoso de manchas amarillas, que venía en un embarque que transportaba vehículos provenientes desde Asia”, explicó Rodrigo Ther, encargado regional de protección agrícola forestal y semillas del SAG Biobío.
“Posteriormente, en el Puerto de San Vicente se encontraron en vehículos que provenían también desde Asia, la especie halyomorpha halys, que es también conocida mundialmente como el chinche apestoso. Ambas especies califican como plagas cuarentenarias, de importancia por el daño para la agricultura y el sector forestal. Su intercepción impide el establecimiento de estas especies en el país”, agregó.
Tras su detección se determinó el aislamiento de la carga para aplicar el protocolo respectivo, a fin de evitar que los especímenes -altamente peligrosos y que están ausentes de tierra nacional- ingresen y se difundan por el país.
El pasado 6 de diciembre en el Puerto de Lirquén, funcionarios del recinto dieron aviso a personal del SAG de la presencia de insectos en el cargamento de automóviles detectando, en esa instancia, solo chinches apestosas de manchas amarillas.
Fuente: Cooperativa.cl

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