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Cedida - Graciela Correa.
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En conversación con El Agro, la dirigente se refirió en primer término a la reciente aprobación del Código de aguas, señalando que “es buena noticia saber que ya hay texto sobre el cual se puede empezar a trabajar y conocer las certezas, pero lo más importante fue el consenso al que se llegó de los diferentes sectores. Participamos de todas las maneras posibles, ocupamos todos los espacios que nos permitieron, y nosotros queríamos ponerle algo de bototo a la discusión, de parte de nosotros que somos los que manejamos las aguas”.

En cuanto a la definición del agua como derecho privilegiando el consumo humano, señaló que aquí lo que se hizo fue dejar por escrito algo que ya estaba en la normativa, y eso obliga más al Estado y lo refuerza a actuar bajo esta concepción.

Y respecto del rol de las juntas de vigilancia, explicó que se amplía al capítulo de aguas subterráneas: se amplía sus atribuciones para hacerse cargo del control de las comunidades de aguas subterráneas a lo largo del país, pero es una responsabilidad que igual la habíamos venido realizando, pero toma ahora mayor relevancia.

“Hemos participado en todas las asambleas explicando esta reforma y sus reformas. Ha sido trabajo continuo porque a la gente del campo se llega llegando a los sectores, y no hay mucha forma de comunicación que no sea palabra a palabra”, aseguró.

Sequía

Los problemas que tiene el país son problemas d falta de inversión, de habernos quedado pensando en la normativa y que no resuelven os problemas que el cambio climático nos está apurando. El código traza una ruta, redefine a la DGA, y  fortalece a las organizaciones de usuario y nos entrega más responsabilidades.

Situación en O’Higgins

Es bien dispar. Cuando fallan los ríos Cachapoal y Tinguiririca, tenemos los derrames, pero a través de la tecnificación y organización de regantes se ha logrado salir adelante. Estamos en la línea de flote con 30 % menos de lluvia y 45 % a 50% menos de caudal en época cuando se necesita el riego de frentón. La caída de ríos, esteros es dramática, y  si no cambia vamos a tener que hacer algún tipo de sacrificio.

Perspectivas de riego

Ha estado un poco mejor de lo que pensamos, la naturaleza porque busca su equilibrio nos ha dado una semana más de respiro, desde este fin de semana hemos tenido caída notable de los esteros, y van a haber sectores que se vean perjudicados. Hay baja de rendimiento, calibre, producción.

Hay dos tipos de urgencia:

  1. Los plazos que nos impone el nuevo Código de aguas: plazos para regularizar derechos de agua e informar a la DGA. Ahí la urgencia está en que en esta región 2/3 de la superficie de riego está en manos de pequeños agricultores, y estos representan el 80% de los agricultores del país, y solo una parte de estos es socia de Indap. A esa gente es muy difícil llegar. Pero hay que ayudarla.
  2. Infraestructura y soluciones frente al cambio climático: necesitamos inversión…todas las anteriores, de salar, acuíferos, tecnificar, desalar, todas!! Es importante venir a preguntarle a la gente que sabe que son los agricultores, la gente de campo, la gente sencilla de campo.

Graciela Correa concluyó señalando que “la solución tiene que ser desde los bototos, desde la realidad. Mesas de trabajo público-privadas. El Estado no ha hecho propuestas y hay que generarlas desde la realidad, analizarlas todas y ponerlas sobre la mesa”.

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