Un potente mensaje fue el que publicó Katherine Heigl -la actriz que participó en la famosa serie “Grey’s Anatomy”- a través de sus redes sociales, en el actual contexto que se vive en Estados Unidos tras el asesinado de George Floyd en Minneapolis, lo que ha desatado intensas protestas en diversas zonas de país.
Esto, porque la reconocida actriz, que interpretó a la doctora Izzie Stevens en la producción, tiene tres hijos junto a su esposo, el cantante Josh Kelley, siendo las dos mayores adoptadas. Aunque sus palabras tienen relación a su hija Adalaide Marie Hope, que hoy tiene 7 años, ya que es afroamericana, al igual que George Floyd.
La actriz decidió utilizar sus redes sociales para hablar sobre la discriminación racial que existe contra los afroamericanos en el país, indicando que “normalmente no uso mi plataforma o las redes sociales para decir mucho sobre el estado de nuestro país. Guardo la mayoría de esos pensamientos para mí mismo. Actúo en silencio y detrás de escena. Dejo que aquellos con mucha más experiencia, educación y elocuencia sean las voces para el cambio. Pero no puedo dormir. Y cuando lo hago me despierto con un solo pensamiento en mi cabeza. ¿Cómo le diré a Adalaide?“, comenzó expresando.
A esto agregó: “¿Cómo voy a explicar lo inexplicable? ¿Cómo puedo protegerla? ¿Cómo puedo romper un pedazo de su hermoso espíritu divino para hacerlo? No puedo dormir. Me acuesto en la cama en la oscuridad y lloro por cada madre de un hermoso y divino niño negro que tiene que extinguir un pedazo del espíritu de su amado bebé para tratar de mantenerlos con vida en un país que duerme profundamente”
“Mi burbuja blanca, aunque siempre está conmigo, ahora comienza a sangrar. Porque tengo una hija negra. Porque tengo una hija coreana. Porque tengo una hermana y sobrinos y sobrina coreanos. Me ha llevado demasiado tiempo interiorizar realmente la realidad de la abominable y malvada verdad despreciable del racismo”, indicó la actriz.
Asimismo, expresó: “Miro a mis hijas. Mi hermana. Mis sobrinos y sobrina. George Floyd. Ahmaud Arbery. Breonna Taylor. Los cientos, miles de millones más que ni siquiera hemos escuchado. Miro y el miedo se convierte en otra cosa. El dolor se calienta y luego estalla en llamas de ira”.
Posteriormente, Heigl pidió que los policías involucrados paguen por lo que han hecho: “Quiero que paguen. Quiero que ese pago sea duro. Quiero que sea una consecuencia dolorosa e irrevocable por sus actos y comportamientos malvados y por esas consecuencias para asustar a todos los demás racistas que todavía se aferran a sus pequeños, odio de mente estúpida”.
“Puede haber habido un momento en que me importaba tratar de cambiar la mentalidad de un racista. Para mostrarles a través del ejemplo y las palabras correctas, están equivocados. Ya no me importa”, declaró.
Finalmente expresó que “lo que quiero es que todos estén tan asustados por las consecuencias del oficial Chauvin que tengan miedo de respirar en la dirección de un hombre, mujer o niño negro. Y mucho menos tratar de lastimarlos. Quiero que tiemblen en sus camas en noche por temor a que ellos también pudieran terminar como Chauvin. Quiero que sea un ejemplo de lo que le sucede a un racista en este país”, concluyó.