A pocos días de rechazarse el proyecto para despenalizar el aborto en el Senado argentino, se conoció que dos mujeres de ese país fallecieron por practicarse una interrupción de embarazo ilegal.
La primera víctima llegó al hospital con un cuadro de shock séptico luego de introducirse una hoja de perejil; un método casero, clandestino y económico, que puede causar infección, dolores y fiebre.
Tras la práctica, la mujer de 34 años desarrolló un cuadro infeccioso por el cual acudió al hospital, donde llegó inconsciente y posteriormente falleció por no poder soportar los daños que había sufrido.
Liz, como se le llamó en la prensa local, dejó un hijo de 2 años huérfano. Además, no era la primera vez que practicaba un aborto, era el tercero.
Dos días después se registró otro caso. Una mujer de 30 años que llegó a un hospital de Pilar con dolorabdominal y fiebre. El diagnóstico: un aborto incompleto, que la llevó hasta la muerte. La familia no quiso dar detalles del suceso.
Defensores del proyecto de ley de aborto aseguran que esto no sucedería si se hubiese aprobado la despenalización. Aseguran que la responsabilidad por cada muerta y presa por abortar recae en el Gobierno y los senadores que votaron en contra o se abstuvieron.
Vale recordar que el proyecto de ley fue rechazado el pasado 8 de agosto con 38 votos en contra y 31 a favor. El Congreso podrá discutir nuevamente el tema a partir de marzo de 2019.