Este lunes, México anunció que le otorgará asilo político a Evo Morales, luego que renunciara a la presidencia de Bolivia el pasado domingo, tras semanas de protestas tras un posible “fraude electoral” y la petición explícita de las fuerzas armadas de ese país para que abandonara el cargo.
Esta medida fue expuesta por el canciller Marcelo Ebrard, quien explicó que el ofrecimiento del Gobierno azteca de Andrés Manuel López Obrador fue aceptada por el ahora exmandatario.
“Solicitamos crear un salvoconducto para garantizar la seguridad y la vida de Evo Morales para que su integridad personal no sean puesta en peligro”, dijo en conferencia de prensa.
“Latinoamérica ha sido testigo en su historia de lamentables y violentos acontecimientos en los que el orden democrático se rompe, en numerosas ocasiones con participación de fuerzas militares”, agregó el diplomático.
Cabe señalar que todo esto explotó, luego que la Organización de Estados Americanos (OEA) anunciara irregularidades en las elecciones del pasado 20 de octubre, cuando nuevamente Evo Morales consiguió mantenerse en el poder y las fuerzas armadas bolivianas le exigieron la renuncia.