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Un grupo de estudiantes, de entre 4 y 14 años, de la escuela más cercana a las termoeléctricas de Coronel presentó rastros de arsénico en la sangre.

Si bien el Seremi de Salud de la región del Biobío aseguró que los niños afectados recibirán desde este martes atención médica, “que implica examen físico, exámenes complementarios y nueva evaluación de orina”, la exposición crónica a este químico tiene graves efectos en la salud.

Según lo indicado por la autoridad regional de Salud, Mauricio Cariaga, la exposición prolongada al arsénico aumenta el riesgo de “presentar alteraciones en la piel, desórdenes en el sistema circulatorio y cáncer de piel no melanoma, vejiga y pulmón”.

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