Silka Seitz, presidenta del Sindicato de Tripulantes de Cabina Lan Express, se refirió al fin de la huelga de la agrupación, que terminó sin lograr los beneficios que pretendían y y con la mantención del contrato anterior.
De acuerdo a Seitz, la negociación no fue “ni limpia ni fácil” y aseguró que se sintieron presionados por la empresa. De acuerdo a la presidenta, durante los 17 días que duró la huelga, la intención de la empresa fue “empeorar las condiciones laborales”.
“La opción de aceptar la última oferta es completamente legal y responderemos a todas las dudas que tengan al respecto”, aseguró Seitz.
“Esta decisión conjunta es una demostración que nuestros trabajadores han optado por una opción que nos protege a todos en vez de tomar una salida individual. No es lo que buscábamos, pero es la mejor forma de cuidarnos del gigante despiadado y cruel que se ha transformado esta empresa que no entiende que sus trabajadores son su mayor capital”, agregó.
La dirigenta lamentó que Latam haya “perdido la oportunidad de llegar a un acuerdo” para cuidar a sus trabajadores y la seguridad de los pasajeros.
Seitz añadió que el actuar de la compañía buscó dar la imagen que la empresa es estratégica para Chile, para que los trabajadores pierdan su derecho a huelga.
“Además, no podemos dejar de mencionar que la empresa no pidió servicios mínimos, garantías que le daba la Ley para poder seguir funcionando durante la huelga”, acusó.