El ministro de Hacienda, Felipe Laraín, manifestó que se encuentra en la fase final del proyecto de modernización tributaria.
“El plazo perentorio para su envío es septiembre. Pero vamos a tratar de salir en agosto con el proyecto”, sostuvo en entrevista con El Mercurio.
Al ser consultado respecto que desde la CPC y la Sofofa han surgido críticas sobre el nivel de avances de las reformas, el ministro explicó que entendía la ansiedad, pero los apuros no son buenos consejeros en políticas públicas.
“Lo importante es llegar con un buen proyecto. Una reforma como la que estamos planeando requiere tiempo. Dentro de las próximas semanas vamos a tener la opción de escuchar y vamos a invitar a distintos actores sociales, al mundo de las pymes, y luego de eso vamos a salir con este proyecto”.
Sobre la posibilidad de una integración tributaria, Larraín dijo que “es parte del trabajo en que estamos en este momento. Hay muchos temas que tenemos que decidir y cortar. Estamos muy avanzados, pero es algo que hacemos con el Presidente Piñera, y él en este proyecto tiene un interés especial”.
“Nosotros hemos planteado que sí estará incluido que la economía digital tribute en igualdad de condiciones con la economía tradicional. Eso significa tratarlos como tratamos a todos. En algunos casos esto es más difícil de hacer y no es el mismo traje para todos. No es lo mismo una industria donde la empresa está establecida en Chile, que una en el exterior. Así, tampoco con un servicio que se envía digitalmente, a otro en que hay una transacción de bienes”, agregó.
Referente a que la implementación de la modernización tributaria se da en un escenario de incertidumbre internacional y si ese escenario pudiese complejizar su discusión, Larraín precisó que el proyecto de modernización tributaria, especialmente en la coyuntura internacional que se vive, cobra especial importancia.
“Buscamos un proyecto que estimule el ahorro, el crecimiento, la inversión y el empleo. Ahora nadie puede garantizar lo que exactamente va a ocurrir cuando las dos principales potencias del mundo tienen una confrontación en materia comercial. Nosotros tenemos que mirar cómo paliar y proteger a los chilenos de los efectos negativos que pueda tener esta coyuntura. También hay oportunidades, algunos mercados se nos pueden abrir. Pero haciendo las cuentas, el efecto neto es negativo”.