Si bien desde la muerte del comunero mapuche Camilo Catrillanca Marín (24) se han registrado una serie de ataques tanto en La Araucanía, como en Santiago, entre el miércoles y jueves de esta semana dos escuelas de Ercilla sufrieron episodios de violencia rural.
Se trata de Santa Rosa de Ancapi Ñancucheo, en la zona de Quechereguas, y de Millaleiva, en el sector de Chequenco, que debieron cerrar su año escolar debido a estos hechos.
La información fue enrtegada ayer por el Ministerio de Educación (Mineduc) y lo ratificó el gobernador de Malleco, Víctor Manoli.
Cabe destacar que, en la escuela de Santa Rosa, fue donde durante la tarde del miércoles 14, se produjo el violento robo de los automóviles en los que se movilizaban cuatro profesoras y que derivó luego en la muerte de Catrillanca.
La suspensión de las clases es porque las profesoras se encuentran con licencia, tras vivir un hecho que fue sumamente traumático para ellas. En tanto y como se indica en El Mercurio, “la escuela de Millaleiva, ubicada a la altura del kilómetro 10 de la ruta 400, sufrió durante la noche del jueves un ataque incendiario que destruyó por completo sus instalaciones y dejó sin concluir su proceso formativo a 120 alumnos de primero a octavo básico”.
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