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En juicio abreviado, el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago condenó a César Valerio Vega, más conocido como “el rey de la comida peruana“, a la pena de 5 años de presidio con el beneficio de la libertad vigilada intensiva, y al pago de multas por un monto superior a los 900 millones de pesos, por su responsabilidad como autor de delitos tributarios.

En la audiencia y previa aceptación por parte del imputado de los hechos contenidos en la acusación, la magistrada Michelle Ibacache aprobó el procedimiento abreviado propuesto por el Ministerio Público, y concedió a Valerio Vega el beneficio de la libertad vigilada intensiva, ponderando su irreprochable conducta anterior y la colaboración prestada con la investigación.

Respecto a las multas impuestas al empresario gastronómico, que deberán ser canceladas en 12 cuotas, estas se detallan de la siguiente manera:

– $236.762.930 de multa por infracción al Artículo 97 N°4, inciso primero, del Código Tributario, correspondiente a declaraciones maliciosamente incompletas o falsas que puedan inducir a la liquidación de un impuesto inferior al que corresponda o la omisión maliciosa en los libros de contabilidad.

– $681.099.891 de multa por infracción al artículo 97 N°4, inciso segundo, del Código Tributario, en lo referido a los contribuyentes afectos al impuesto a las Ventas y Servicios u otros impuestos sujetos a retención o recargo, que realicen maliciosamente cualquiera maniobra tendiente a aumentar el verdadero monto de los créditos o imputaciones que tengan derecho a hacer valer, en relación con las cantidades que deban pagar.

Valerio Vega inició su negocio culinario en 2003 junto a su tío Pablo Vega, en el mítico restaurant Machu Picchu, hasta convertirse en un holding gastronómico y un referente de la cocina peruana en Chile. Sin embargo, una investigación de la Fiscalía Metropolitana Oriente detectó delitos tributarios por abultados montos.

Incluso, el 5 de abril pasado el mismo tribunal decretó su prisión preventiva, tras ser formalizado por emitir boletas y facturas ideológicamente falsas. Valerio Vega se había puesto de acuerdo con los proveedores para emitir estas boletas y facturas para rebajar el pago del IVA o el impuesto a la renta.

Entre los restaurantes de su propiedad están el Ayar Achu, en La Reina; Lima Limón, en Las Condes, La Florida, La Reina y Santiago Centro; Machu Picchu y Entre Piscos, en Providencia; y Brisas del Mar, Pachas, Mama Kuna, El Taita y Perú Mágico, en Ñuñoa.

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