El senador Iván Flores destacó la creación del Comité de Seguridad y Soberanía Alimentaria, afirmando que la crítica situación que vive el país en esta materia “no es de ahora ni responsabilidad de este Gobierno, es una realidad que se ha venido agravando sostenidamente en el tiempo. Llevo seis años por lo menos haciéndolo notar a los respectivos gobiernos y ha sido esta administración, a cargo del Presidente Gabriel Boric, la que ha decidido asumir este desafío y esta causa”.
El parlamentario, junto con señalar que este Comité de Seguridad Alimentaria estará integrado por representantes del sector público y privado, y por académicos, agricultores y comunidades, agregó que “este es un imperativo ético, porque estamos hablando de la seguridad esencial del alimento y debe ser un trabajo transversal y eficiente para que rápidamente tengamos propuestas”.
“Con un panorama económico sombrío, con un IPoM que señala bajo crecimiento, aumento de tasas de interés e inflación, nos preocupa, porque las familias seguirán adquiriendo alimentos cada vez más caros y no basta con una compensación o ayuda para canastas básicas, no será suficiente”, agregó.
Sobre la situación actual y lo que ocurre con la producción nacional de alimentos, Flores señaló que “los costos de producción de los agricultores han aumentado en todos los frentes, y esta es una situación que ya venía desde la pandemia, pero que se ha agudizado con el contexto mundial, incluyendo la subida del dólar y el aumento del precio del petróleo, pero sobre todo por el aumento del precio de los fertilizantes”.
“La preocupante tendencia a seguir dependiendo del exterior nos deja en una situación de enorme vulnerabilidad y tal como ya han adelantado muchos organismos internacionales, el fantasma del hambre es real, y nuestro país debe ser proactivo. Ningún Gobierno quiso asumir esta causa de verdad y con políticas públicas eficientes y directas. Hoy esperamos que este comité, que comenzará a trabajar este jueves, dé frutos para empezar a cambiar la preocupante tendencia”.
“Todos los documentos y propuestas que hemos recibido apuntan a la urgencia de avanzar en una agricultura sostenible e inclusiva, sumando aportes desde la ciencia y la tecnología para poder innovar e implementar un uso más eficiente de los recursos naturales, considerando la preocupante crisis hídrica que se registra en el país”, dijo.
“Pero, también, mejorar las vías de distribución y comercialización, la generación de más ferias libres que representen la oferta necesaria para las familias y para que tanto pequeños agricultores como pescadores artesanales puedan ofrecer sus productos. Sin el apoyo del Estado, esto es muy difícil de conseguir”, concluyó.