Encargada Nacional de Reconstrucción
y Gestión en Prevención de Riegos
MINVU
Chile ha vivido 14 catástrofes naturales en los últimos 8 años y ha debido reconstruir más de 260 mil soluciones habitacionales y 300 obras urbanas. A diferencia de lo que está sucediendo en Las Condes, existen ejemplos exitosos de integración social con apoyo transversal de la comunidad y durante nuestro recorrido en las diversas regiones lo hemos comprobado. ¿Pareciera ser que las regiones nos están dando el ejemplo? Sin lugar a dudas, el Programa de Integración Social y Territorial es una política habitacional que llegó para quedarse.
En Coquimbo post tsunami del 2015, construiremos un proyecto habitacional en el borde costero que dará solución a familias damnificadas vulnerables, y el resto de los departamentos estarán disponibles para familias de clase media. Consiste en un conjunto habitacional tsunami resiliente, en cuyos primeros dos pisos habrá equipamiento y servicios, no viviendas.
En Alto Hospicio, el proyecto privado Montesol acogió a 72 familias damnificadas vulnerables. Además, estamos construyendo dos conjuntos habitacionales que darán solución a familias damnificadas y acogerán también a casos sociales emblemáticos de la región.
En Valparaíso post incendio, varios damnificados recibieron un subsidio y pudieron comprar viviendas en localidades de clase media. Estos son solo algunos ejemplos que, por supuesto, seguiremos incentivando. Esta nueva tendencia es parte de la política habitacional donde lamentable o afortunadamente a través de una catástrofe que ha sido de mucho pesar para nuestros compatriotas, se abrió una oportunidad de reconstruir de manera digna y lo más importante con condiciones inclusivas para ir dejando atrás la segregación.