Cerca de 70 militantes del Partido Socialista (PS) presentaron su renuncia a la colectividad. A través de un comunicado de ocho páginas, se dirigieron a la directiva para informar de la decisión, en donde aseguran que la colectividad liderada por Álvaro Elizalde “vive una crisis profunda”.
En el texto entregado por los exmilitantes se hace una crítica a la formación del partido. En él aseguran que “el Partido Socialista vive una profunda crisis: de proyecto histórico, de liderazgo político, institucionalidad y democracia interna. Hoy el PS se ha vuelto irreconocible a la luz de su rica historia y tradición política”.
Los firmantes critican que sería “evidente la debilidad de una voz y la ausencia de un proyecto socialista para Chile en la actual coyuntura”. Además señalan que “el PS actual se ha vaciado de la legitimidad para representar la continuidad histórica del socialismo chileno”.
Las masivas renuncias se suman a la del diputado, Marcelo Díaz, quien dejó el partido después de permanecer 30 años en sus filas y que, según lo que aseguró, estuvo motivado por la falta de un Estado de Derecho: “El PS es una organización sin idea, sin democracia interna, sin un estado de derecho, y eso lo denuncié durante la elección interna”, afirmó.
Entre las figuras más reconocidas que dejan el partido está el extimonel de la bancada, Germán Correa, el académico Ernesto Águila y el exvicepresidente de Enami, Jaime Pérez de Arce.
El comunicado también hace alusión a los conflictos de narcotráfico en los que se ha vinculado al Partido Socialista y que les ha costado enfrentamientos internos: “La dirección del PS no ha estado a la altura ni ha actuado con prontitud y contundencia frente a las graves denuncias de irregularidades e, incluso, de niveles de convivencia con el narcotráfico y delincuencia”.