El capellán de la Fundación Las Rosas, Andrés Ariztía de Castro, realizó una fuerte crítica al complejo escenario que vive la Iglesia Católica en Chile en conversación con La Gran Mañana Interactiva.
Esto, a propósito de la renuncia que presentaron 34 obispos de la Iglesia Católica, quienes pusieron sus cargos a disposición del Papa Francisco luego de las reuniones que sostuvieron en Roma.
El sacerdote Ariztía de Castro, aseguró que no basta con la renuncia de los 34 obispos, entre ellos, la del cardenal, Francisco Errázuriz y el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.
“Los chilenos queremos nuestra Iglesia, pero no toleramos este tipo de liderazgos, ese es el punto. El cambio de ciertos líderes es necesario, pero es insuficiente. Es necesario el cambio de estructura y esa es la incorporación de los laicos y las mujeres”, afirmó.
El capellán de Fundación Las Rosas, criticó que “acá no se ha hecho un gesto de reparación, al contrario, se han puesto piedras en el camino. Ahora se está pidiendo perdón gracias al Papa Francisco”.
Además, agregó “hay una oportunidad de ser mejores, el Papa no viene a ser árbol caído, viene a colaborar en una reparación y en hacer los cambios estructurales que la Iglesia necesita”.
El sacerdote aprovechó de hacer un llamado al Gobierno y precisó que el desafío no es solo para la Iglesia Católica, sino que para el Ejecutivo, respecto a sus políticas públicas.
“Es necesario hacer una ley de beneficios tributarios. El discurso social de este Gobierno no se va a cumplir, si es que no se hace una legislación que respalde las donaciones, las que hasta ahora dependen del sector civil”, dijo el capellán de la Fundación Las Rosas.