Un catastro de la Municipalidad de Santiago mostró que en la comuna viven al menos 6 mil personas que deben pagar arriendos y subarriendos abusivos. Se trata principalmente de extranjeros que ocupan alrededor de 100 inmuebles y cancelan un promedio de $150 mil por una pieza en condiciones paupérrimas de habitabilidad.
La información aparece hoy en El Mercurio, que consigna que Santiago es la comuna con mayor déficit habitacional de la Región Metropolitana y que, según datos del Censo 2017, requiere al menos 14.405 nuevas viviendas para superar esta carencia.
La publicación añade que los arrendatarios deben lidiar con precios que superan con creces el valor promedio del arriendo de una casa. Esto, sin contar el estado de estas: cocinas y baños compartidos, malas condiciones de higiene, plagas y humedad. Todo en un escenario de hacinamiento.
Representantes de la Municipalidad de Santiago expusieron esta situación ayer en la Comisión de Vivienda y Urbanismo del Senado. El municipio planteó medidas para desincentivar el arriendo abusivo, como exigir a los arrendadores o subarrendadores que sus inmuebles cumplan con las mismas exigencias sanitarias, de constructibilidad y de seguridad a las que están sometidas las residenciales.
Además, busca modificar dos artículos de la Ley General de Urbanismo y Construcciones, para incorporar la prohibición de que un inmueble sea habitado por un número de personas que supere su carga ocupacional preestablecida. Asimismo, espera dotar a los funcionarios municipales de la facultad para ingresar a fiscalizar este tipo de viviendas.