En el Superclásico de este sábado en el estadio Monumental, el técnico de Universidad de Chile, Frank Darío Kudelka, tiene la gran opción de poner fin a 17 años sin ganar al archirrival Colo Colo en Macul.
Sin embargo, el estratego argentino se desmarcó de esa larga racha negativa durante la conferencia de prensa de este jueves en el Centro Deportivo Azul de La Cisterna.
“Lo tomo como un buen desafío. Es una oportunidad linda para nosotros de ser parte de la historia. Pero no me puedo hacer cargo de algo que ocurrió cuando no estaba, me generará una carga de emociones y preocupaciones. Nadie en los clásicos y en otro tipo de partidos, después de las cosas que ocurran, sale a decir que se equivocó en la previa”, reconoció el ex DT de Talleres de Córdoba.
“(El derbi) lo vivo con la adrenalina de ser partícipe de este hermoso clásico importante a nivel mundial. No lo vivo presionado, no es mi estilo. Eso aparece en las personas, pero mientras pueda trato de no vivir en ello porque no disfruto”, añadió.
Además, no escondió su preocupación por el goleador y capitán del Cacique, Esteban Paredes, quien ha sido el gran verdugo de los laicos en los últimos clásicos.
“Si hace alguno, tendremos que hacer más goles que Paredes. Es un muy buen jugador y lo valoro, lo veo de esa manera porque me gusta el fútbol. Por lo que ha hecho, es un jugador de cuidado, sabemos que se envalentona en estos partidos. Como equipo, tenemos que ser superiores a él y su equipo”, enfatizó.
También, el trasandino sostuvo: “Tenemos mucho por ganar. En escalar, en encontrar un buen funcionamiento en el equipo. Los triunfos ayudan a eso, a progresar en la tabla. Es un partido tan lindo e importante, que nos puede catapultar a cosas mucho mejores”.
Por último, sobre el Banderazo de este viernes en el Estadio Nacional, Kudelka dijo: “Un día menos de trabajo es eso, no voy a negarlo. Pero también debo considerar que la gente quiere estar cerca. Es algo de la cultura y que se viene haciendo hace tiempo, y así debo entenderlo. No quiere decir que mañana no hagamos cosas, aunque no escondemos mucho. No puedo ponerme a tapar la montaña con la mano para que no vean lo que hago. En esto no hay demasiado misterio, nadie murió por un partido de fútbol”.