Poco duro la alegría para el hijo del comentarista deportivo Fernando Solabarrieta, Nicolás, quien tenía todo listo para generar sus primeras “armas” en el fútbol profesional, esto porque el presidente de Tacuarembó de Uruguay, Fernando Cardozo, le cerró la puerta al delantero por no informar que venía con una lesión.
“En la directiva no cayó bien que viniera lesionado. Nos pareció poco serio. Nos gustó el hecho de tener un chileno para generar el vínculo en un futuro préstamo o una venta”, dijo el mandamás en conversación con CDF.
El delantero que actualmente juega en la Universidad de Albany en Estados Unidos, anunció en su llegada que venía saliendo de un desgarro, por lo que en desde la directiva aseguraron que trataron de hacer todo lo posible por buscar una buena opción.
“No quisimos ser descortés y echarlo para atrás, tratamos de buscarle una vuelta, pero no lo podemos ver porque mañana cierra la ventana de pases”, dijo Cardozo.
“Nosotros sin verlo jugar no vamos a poder hacerle contrato. No están las condiciones para que lo fichemos ahora, quizás en el próximo mercado de junio”, sentenció.