Después de un año marginado por una rotura del tendón de Aquiles, Claudio Bravo volvió a sonreír. El meta chileno fue titular y jugó a gran nivel con el Manchester City al atajar el penal del triunfo contra el Liverpool tras igualar a 1 por la definición de la Community Shield.
En un intenso partido disputado en Wembley, la apertura de la cuenta de los citizen llegó en apenas 12 minutos, cuando Raheem Sterling aprovechó un centro del sector izquierdo y con lo justo batió al brasileño Alisson. Sin embargo, no solo eran alegrías para los skyblues en los compases iniciales, ya que un minuto después Leroy Sané salió por lesión.
En la segunda mitad, el vertical le negó el segundo a Sterling, y luego Bravo estuvo extraordinario para anticiparse a Roberto Firmino cuando era el último hombre en el 50′. Era un buen partido del ex Barcelona, que además de ser muy sólido con los pies luego se lució con una notable atrapada en el 56′, con algo de fortuna ya que luego en el rebote el travesaño le negó el gol a Mohamed Salah.
Sin embargo, los avisos constantes de los reds finalmente encontraron respuesta en el 77′, cuando Joel Matip se impuso en un tiro de esquina para de cabeza definir ante el meta chileno y marcar la igualdad.
En los minutos finales, Salah tuvo una chance inmejorable para sentenciar el triunfo cuando había dejado al meta chileno atrás con un globito, pero Kyle Walker estuvo notable para sacar el balón desde la línea con una contorsión.
Y llegados los penales, Bravo demostró porque son su especialidad. Desde los doce pasos, el dos veces campeón de la Copa América le atajo el tiro a Georginio Wijnaldum, quien fue el único jugador que falló su lanzamiento, por lo que desató la euforia de sus compañeros y el cuadro celeste alzó la Supercopa inglesa.
Así, Bravo podría jugar más minutos en la siguiente temporada de la Premier League, donde el Manchester City debuta ante el West Ham United de Manuel Pellegrini el próximo sábado a las 7:30 de la mañana.
ATON Chile – P.C.