El jefe de la unidad de pensiones privadas de la OCDE, Pablo Antolín, está incrédulo ante el nuevo proyecto que permite un nuevo retiro de 10% desde los fondos de pensiones.
En conversación con El Mercurio, dijo que “nos gustaría que alguien nos explicara cuál es el objetivo de esto, porque permitir el retiro a todo el mundo sin criterios de máxima necesidad, no se puede entender”.
Añadió que “desde aquí se ve con incredulidad, no se entiende por qué se hace, en base a qué argumentos”. “En el largo plazo no sé cómo la gente va a financiar su jubilación. Van a llegar a los 65 años y se va a ir todo el mundo al pilar solidario, lo que genera un gasto público y hay que financiarlo”.
El economista señaló que “habrá mucha gente que no tiene ahorros y habrá mucha gente que no va a tener ahorros para tener una pensión lo suficientemente grande, como le gustaría tener“. Pese a su reticencia, Antolín señaló que “en la mayoría de los países se han establecido causas bajo las cuales se puedan sacar y son causas excepcionales de situaciones de dureza financiera”.
Lo que propone la OCDE en esta materia en el corto y mediano plazo es que “se creara una ley a perpetuidad de acceso a los ahorros previsionales como medida de último recurso y basada en criterios de pérdida de empleo prolongada, reducción significativa de ingresos y enfermedad terminal y punto. A partir de ahí, quien cumpla con esos criterios puede sacar sus ahorros, con Covid-19 o aunque no haya Covid-19. Y los que no, no”.