El pasado 27 de agosto Hernán “Nano” Calderón fue trasladado a Santiago uno, con el fin de cumplir la cautelar de prisión preventiva, tras pasar siete días end la clínica psiquiátrica “El Cedro“.
De acuerdo a La Cuarta, los reclusos al interior del centro se encontraban al tanto del ataque con arma blanca que realizó el joven de 23 años en contra de su padre, el abogado Hernán Calderón, así como también del sector donde sería internado, el Área de Salud Ambulatoria (ASA).
El citado medio había obtenido fuentes de Gendarmería, quienes le comunicaron que “varios reclusos llegaron a la mañana siguiente de su llegada al ASA ‘con la segunda’. O sea, diciendo que se sentían mal, que tenían heridas infectadas, pero lo que realmente querían era ver a Hernán Calderón Argandoña“.
Este acercamiento tendría relación con ofrecerle a “Nano” Calderón protección dentro de la cárcel, a cambio de dinero. “En la cárcel se vive la pobreza y él (Nano) en este momento es una mina de oro”, fundamentó la fuente a La Cuarta.
El futuro de “Nano” Calderón
Calderón hijo se encontraría en este módulo cumpliendo una cuarentena por protocolo Covid-19, además de buscar un tratamiento que busca compensarlo. “El interno ha respondido bien, no ha tenido problemas con los funcionarios y está dispuesto a seguir las indicaciones del personal médico“, expresaron desde el recinto.
No obstante, esta situación cambiará una vez pasen los 14 días de aislamiento, pues el plazo de 120 días de investigación que decretó la jueza es amplio, tiempo durante el cual sería trasladado al módulo 11, exclusivo para imputados que hayan participado en delitos de alta connotación pública, así como exfuncionarios del FF.AA. y de orden.