Los “chalecos amarillos” volvieron a las calles de Francia en su vigésimo sábado de protestas lanzadas hace cuatro meses, y a pesar de las prohibiciones a manifestar ante el temor de nuevos enfrentamientos.
La prefectura de París prohibió nuevamente las manifestaciones del sábado en la famosa avenida Campos Elíseos, que fue saqueada y sufrió graves daños en las manifestaciones del pasado 16 de marzo. Las fuerzas del orden extendieron la prohibición en un perímetro que incluye el palacio presidencial Elíseo y la Asamblea Nacional.
Poco después del mediodía comenzaron dos manifestaciones y cuatro concentraciones, dijo la prefectura en un comunicado, sin especificar los lugares.
Unos 300 manifestantes se reunieron ante la estación del Este en París.
Agencia AFP.