En la jornada de ayer, las autoridades de Alemania autorizaron las excavaciones en los distintos lugares en que estuvo el principal sospechoso del secuestro y asesinato de la pequeña Madeleine McCann.
Durante el procedimiento de hoy se encontró un sótano oculto al interior de una de las viviendas que arrendó Christian Brueckner en 2007, mismo año en que desapareció la menor.
Al ingresar al lugar, los detectives encontraron fotografías y vídeos que fueron enterrados por Brueckner. En total se hallaron 8 mil piezas, que fueron escondidas por el alemán y que se catalogaron como “perturbadoras”.
“Christian Brueckner tenía el jardín junto al mío. Llegó en 2007 y se fue después de un año. Era una pequeña estructura de madera con solo una habitación para guardar herramientas y otras cosas, pero tenía una cocina. El edificio no era realmente una casa, podría llamarse un cobertizo. Pero tenía una bodega y debajo habría cimientos. Este edificio fue destruido en 2008″, afirmó Wolfang Kossack, vecino del lugar.
Luego del hallazgo, las autoridades rastrean con radares de última tecnología para dar con el paradero de Maddie, quien fue raptada el 3 de mayo de 2007, mientras sus padres estaban cenando con amigos en un resort de Portugal.
La fiscalía afirma que tiene “pruebas concretas” para considerar el deceso de la menor, pero no tiene pruebas médicolegales para confirmar el hecho.
Por su parte, Christian B de 43 años, indicado como el principal sospechoso, está detenido en Alemania por otro caso similar. En la época de la desaparición de Maddie, vivía a escasos kilómetros del resort de Praia da Luz, condado portugués donde fue raptada McCann.