La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reconoció de manera oficial las propiedades medicinales que contiene el cannabis, en una votación realizada en Viena, por parte de la Comisión de Estupefacientes, el órgano ejecutivo sobre políticas de drogas del organismo.
Sumado a esto, la entidad quitó el cannabis de la lista de drogas más peligrosas como la heroína, indicación al que países africanos y asiáticos se opusieron.
La mayoría de los 53 Estados de la Comisión optó por retirar el cannabis y su resina de la Lista IV de la Convención sobre drogas de 1961, lo que significa que la entidad reconoció oficialmente su utilidad médica.
La votación se produjo casi dos años después de un dictamen emitido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que reconocía la utilidad médica del cannabis y también recomendaba su retirada de la Lista IV.