Las autoridades de Rusia han notificado este lunes cerca de 172.000 casos y más de 600 muertos por coronavirus durante el último día, en medio de un repunte que ha llevado al país a rozar el umbral de los trece millones de contagios desde el inicio de la pandemia.
El centro operativo nacional para la lucha contra el coronavirus ha dicho que durante las últimas 24 horas se han registrado 171.905 positivos y 609 fallecidos, con lo que las cifras totales ascienden a 12.982.023 y 336.023, respectivamente.
La cifra de casos es inferior a los 180.071 registrados el domingo, cuando el país fijó su máximo hasta la fecha, en el marco de un repunte durante las últimas semanas achacado a la propagación de la variante ómicron, altamente contagiosa.
En este sentido, el director del Centro de Epidemiología y Microbiología Gamaleya, Alexander Gintsburg, ha detallado que entre el 90 y el 95 por ciento de los casos en la capital, Moscú, son a causa de la variante ómicron.
“De momento un 90-95 por ciento de los que se enferman en Moscú, de los que tienen reacción positiva a las pruebas rápidas de COVID-19, tienen ómicron”, ha manifestado en unas declaraciones concedidas a la televisión Rossiya 24.
“Únicamente la vacunación, me refiero a la dosis de refuerzo, la que recomienda el Ministerio de Salud ruso, da la posibilidad de adquirir la inmunidad a largo plazo, formar las células de memoria que viven mucho y tienen alta capacidad de neutralizar el virus”, ha argüido.
Por otra parte, 55.683 personas recibieron el alta médica tras recuperase de COVID-19 durante el último día, con lo que esta cifra asciende a 10.624.954.
La Oficina Nacional de Protección al Consumidor (Rospotrebnadzor) ha manifestado que más de 5,3 millones de personas se encuentran bajo observación como casos sospechosos de contagio, cifra que supera por primera vez los cinco millones.