El Ejército de Israel ha asegurado este viernes haber matado a “más de 20 terroristas” durante sus operaciones del último día en la ciudad de Jan Yunis, situada en el sur de la Franja de Gaza, al tiempo que ha confirmado el derribo de un “objeto aéreo sospechoso” que entró en su territorio desde el enclave palestino.
Así, ha indicado que “los militares eliminaron a más de 20 terroristas, la mayoría de ellos a corta distancia”, en el marco de las operaciones en Jan Yunis, uno de los epicentros durante los últimos días de la ofensiva lanzada tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
“Como parte de las actividades militares, las fuerzas llevaron a cabo redadas en varios objetivos terroristas y edificios militares, donde fueron hallados granadas, explosivos, equipamiento militar, fusiles de asalto tipo Kalashnikov y munición”, ha explicado.
Asimismo, ha confirmado bombardeos contra “varios edificios militares desde los que operaban terroristas. Varios terroristas armados que operaban cerca de los militares fueron eliminados, tras lo que se localizaron lanzagranadas tipo RPG, junto a otras armas”.
Jan Yunis ha sido uno de los principales objetivos del Ejército israelí durante las últimas semanas debido a que considera que los principales altos cargos de Hamás se encuentran escondidos en esta zona, tras más de tres meses de ofensiva, cuyas primeras fases se centraron en el norte del enclave.
El Ejército de Israel ha señalado que también han sido llevadas a cabo redadas contra “infraestructuras terroristas” en el centro y el norte de Gaza, donde fueron “eliminados” varios “grupos armados”. Concretamente, en el campamento de refugiados de Al Shati fueron eliminados “cerca de diez terroristas”.
“Durante la noche, los sistemas de defensa aérea interceptaron un objetivo aéreo sospechoso que cruzó el territorio de la Franja de Gaza hacia el sur de Israel. Se activó la alerta en el Mando Interior, en línea con las políticas en vigor”, ha zanjado.
El Ejército de Israel lanzó su ofensiva contra Gaza tras los ataques de Hamás, que dejaron cerca de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados. Las autoridades gazatíes, controladas por el grupo islamista, han denunciado más de 27.100 muertos, a los que se suman más de 365 en Cisjordania y Jerusalén Este en operaciones de las fuerzas de seguridad y por ataques ejecutados por colonos.