Javier Torres/Aton Chile
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Dos investigaciones conjuntas de la Fiscalía de Arica y la Brigada Antinarcóticos de la PDI permitieron incautar, solo en lo que va del mes de enero la mitad de droga decomisada en 2017: más de una tonelada de droga, entre clorhidrato de cocaína y marihuana.

El último golpe del órgano persecutor y la policía civil se dio este fin de semana, con la detención de tres ciudadanos colombianos que coordinaron el ingreso al país y posterior traslado hasta la Región Metropolitana de 749 kilos de droga, avaluados en 4.242 millones de pesos.

Los imputados John Aguirre López, Fabio Morales Corrales y Jaime Ríos Medina fueron detenidos por los funcionarios policiales con 715 kilos 920 gramos de cannabis tipo “cripy” y 33 kilos 120 gramos de cocaína, ocultos en un camión tres cuartos estacionado en el recinto de un mall de la comuna de Maipú.

En la misma diligencia, los detectives incautaron además un automóvil Hyundai modelo “Veloster” año 2016, 2 millones 719 mil pesos chilenos, US$ 5.057 y 170 mil pesos colombianos, además de teléfonos móviles que este grupo utilizaba para dar movilidad a su producto ilegal.

El fiscal a cargo de la indagatoria, Daniel Valenzuela, los formalizó en calidad de autores del delito de tráfico de drogas y se decretó su prisión preventiva, junto con un plazo de investigación de 120 días.

“Esta investigación se da en un contexto de persecución del delito de tráfico de estupefacientes, buscando no solo la incautación de la droga, sino además el desbaratamiento de las organizaciones, mediante la incautación de todas las ganancias ilícitas que provienen de este negocio y todos los dineros que se destinan, incluyendo los vehículos y bienes inmuebles”, señaló el persecutor.

Por su parte, el jefe regional de la PDI, prefecto inspector Leonardo Torres, señaló que si bien la cantidad de droga incautada en este operativo resulta relevante, para la Policía de Investigaciones es más importante aún poder dar golpes certeros a organizaciones criminales que han puestos sus ojos en territorio nacional para su negocio ilícito.

“El volumen de esta incautación nos indica que hemos golpeado fuertemente a una organización criminal de un tamaño considerable, que tiene recursos suficientes para movilizar grandes remesas desde el extranjero hacia la zona central de nuestro país”, añadió.

“Esta diligencia va en la dirección correcta que nos hemos propuesto como PDI, de hacer frente con decisión y valentía al crimen organizado y proteger nuestra fronteras, a través del análisis y la inteligencia policial”, concluyó.

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