La defensa del ex-agente de la DINA el brigadier (R) del Ejército, Miguel Krassnoff Marchenko pedirá su libertad condicional, pese a los más de 500 años de presidio que pesan en su contra por múltiples condenas por asesinatos y desapariciones durante el gobierno cívico-militar.
El abogado Raúl Meza, representante de varios condenados por violaciones a los derechos humanos, recluidos tanto en Punta Peuco como Colina I, anunció que presentará un recurso de amparo en favor del oficial retirado, hoy de 72 años.
Meza se sumará a los habeas corpus que 7 condenados ex-agentes lograron ser acogidos por la Sala Penal de la Corte Suprema, a quienes pese a haber cometidos delitos de lesa humanidad, se les concedió el beneficio de la libertad condicional.
Meza detalló al diario vespertino “La Segunda” que las resoluciones del máximo tribunal del país sientan “un precedente judicial histórico” y que genera “una muy buena expectativa” para “presentar recursos de amparo respecto de aquellos reos que cumplen con los requisitos objetivos que establece la ley, que son el cumplimiento de más de la mitad de la pena y conducta intachable”.
El jurista recordó que Krassnoff lleva 15 años de condena cumplida y que “ha intentado ocho veces la libertad condicional y las ocho ha sido negada por la comisión de libertades, por la Corte de Apelación y la Corte Suprema”.
Contra las pretensiones del abogado y del violador de derechos humanos corren los más de 500 años de presidio a los que está condenado.
Miguel Krassnoff Martchenko, siendo teniente, participó el 11 de septiembre de 1973, en el asalto y desvalijamiento de la casa presidencial de Tomás Moro.
Entre el 7 de enero y el 8 de febrero de 1974 cursa el ramo de Operativo/Contrainsurgencia Urbana en la Escuela de las Américas de EE.UU. en Panamá.
A su regreso se incorpora como tercer hombre en el escalafón de la Brigada de Inteligencia Metropolitana de la DINA, bajo el mando de Marcelo Morén Brito.
Asume como jefe del centro de torturas que funciona en Londres 38 hasta agosto de 1974, pasando luego a comandar la Brigada Caupolicán y las agrupaciones Halcón 1 y 2 en Villa Grimaldi y José Domingo Cañas, centrando su represión en el MIR.
En ese período participa, entre muchos otros crímenes, en los asesinatos de Lumi Videla, el sacerdote Antonio Llidó, Carmelo Soria, Alfonso Chanfreau y de Diana Arón, joven periodista que a pesar de su avanzado embarazo fue sacada de una cama hospitalaria, torturada y asesinada con la participación directa de Krassnoff.