Con velas y flores acudió un grupo de personas a la Plaza de armas de Santiago, frente a la Catedral más importante del país, para repudiar los escándalos de abusos sexuales vinculados con la Iglesia.
La iniciativa impulsada por la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico de Chile, fue descrita por su vocero, Helmut Kramer, como un “encuentro para reunir a todas y todos quienes creemos en una sociedad sin abusos de ningún tipo, en especial aquellos causados por miembros de la Iglesia”, según reseñó la agencia EFE.
Kramer, quien se declaró víctima del sacerdote Leonel Ibacace, explicó que la vela que llevaron los asistentes era para “alumbrar lo que está pasando en este momento en Chile, especialmente con la oscuridad que ha tenido la Iglesia Católica frente a los hechos”; mientras que la flor simboliza a los afectados que han muerto esperando se haga justicia y a los que no se han atrevido a denunciar.
Durante la actividad, también protestaron contra el cardenal Ricardo Ezatti, investigado por la comisión de encubrimiento en casos de abusos sexuales, cuya cita para declarar fue reagendada por el fiscal a cargo. Los afectados afirman que el clérigo conocía desde hace mucho tiempo los casos y denunciaron haberse sentido maltratados por este.