El tornado que afectó a 350 casas en Talcahuano, 80 en Concepción y a 780 con averías en Los Ángeles. En total, 1.200 viviendas fueron dañadas. Con este contexto, centenares de personas salieron a las calles a reparar sus techumbres, ventanas y despejando calles con los escombros que dejaron los vientos.
Las labores deben ser rápidas, ya que cómo si no fuera suficiente un tornado, la Dirección Meteorológica pronosticó tormentas y un nuevo sistema frontal a partir de este martes.
A los vecinos encaramados en los techos poniendo protecciones y clavado techos, se sumaron funcionarios estatales y municipales, así como personal de las Fuerzas Armadas y Carabineros que llegaron a colaborar.
“Como parte de la II Zona Naval, recibimos la instrucción de contribuir al retiro de escombrosy a habilitar el sector lo antes posibles”, sostuvo a El Mercurio el capitán de Fragata, César Aguirre.
“Nos ha costado encontrar materiales de construcción, imagínate, son dos pasajes completos que tuvieron destrozos”, afirmó Aguilar.
Por su parte el alcalde de Talcahuano, Henry Campos, alentó a los vecinos con una ayuda que viene en camino. Ya que paradójicamente los materiales de construcción que estaban en bodegas de gobierno y municipio, de cara a enfrentar emergencias de invierno, fueron enviadas a Los Ángeles como ayuda.
Por su parte, el ministro de Vivienda, Cristián Monckeberg, anunció un catastro y que las familias que no tengan seguros recibirán ayuda del Gobierno.
