“No solo agua”, dijo el ministro de Salud, Jaime Mañalich, que le tiraron cuando iba saliendo del Hospital Padre Hurtado, luego de visitarlo. A esa hora se vivían manifestaciones en los alrededores del recinto.
El secretario de Estado llegó hasta el hospital debido a que han registrado balaceras en las inmediaciones y que proyectiles han penetrado vidrios, poniendo en riesgo la seguridad de los funcionarios y pacientes.
Mañalich anunció que “se van a tomar medidas de seguridad en el Hospital Padre Hurtado, que atiende a medio millón de habitantes, ante los riesgos que están expuestos el personal de salud, y que están incluidos en la Ley Consultorio Seguro“. Las medidas de seguridad incluyen el blindaje de ventanas y el aumento de dotación de protección del centro asistencial.
Al terminar su visita, dijo que “esto es infraestructura crítica. Cuando vemos lo que está pasando en el Hospital Padre Hurtado, que tiene que evacuar pacientes, que no se pueden atender, que todo el sexto piso que tiene una estructura más frágil en sus muros, que tiene que ser vaciado, estamos en un problema sanitario que lo único que hace es hacer sufrir a las personas”.
Agregó que “es por eso que necesitamos un reforzamiento de la protección de esta infraestructura crítica para seguir funcionando”, aludiendo al proyecto de ley para que FF.AA. puedan proteger estos puntos sin la necesidad d eun decreto de Estado de Excepción.
El ministro tuvo que enfrentar una protesta de funcionarios en su contra, quienes lo increparon y exigieron su renuncia. Debido a la escala de las manifestaciones, Mañalich tuvo que resguardarse hasta que las condiciones de seguridad fueran adecuadas. Al lugar llegaron FF.EE. de Carabineros.
En su salida, el ministro tuvo que contar con un alto resguardo de Carabineros. El auto que los trasladaba sufrió rayados en su contra.
Salida del ministro @jmanalich pic.twitter.com/Rdfk8akAhr
— Davor Gjuranovic (@dondavor) November 29, 2019