Desde hace tres meses la Federación Metropolitana del Comercio Detallista solicita a las autoridades eliminar el pago de patentes municipales mediante los trámites legislativos pertinentes porque están impedidos de abrir sus negocios debido a las cuarentenas. Este 31 de julio vence el plazo para cumplir con la segunda cuota del año, pero contrario a lo que esperaban los dirigentes no se ha realizado ninguna gestión y se agregó un nuevo problema, la situación de las patentes de alcoholes.
Por un olvido legal no se contempló en la ley a los comerciantes que tienen patente de alcoholes, quienes actualmente no pueden trabajar y están expuestos a perderla sino pagan, mismo escenario que enfrentan discotecas, hoteles, bares, pubs y moteles, entre otros.
El presidente de la Federación Metropolitana del Comercio Detallista, Pedro Zamorano, explicó que muchos municipios determinaron ampliar el periodo de pago hasta el 31 de octubre de acuerdo con las facultades que les otorgó una indicación a la ley considerando los daños del estallido social que afectó al sector. Es una prórroga sin multas e intereses y rige en la actualidad.
Zamorano exlpicó que en esa oportunidad no se consideró en la concesión la patente de alcoholes en ninguna modalidad.
“En enero la medida se ajustaba a la realidad y significaba una gran ayuda. Pero el escenario cambió totalmente para el comercio detallista de la Región. Por una ordenanza superior y lógica los negocios se han visto obligados a mantener cerrado sus locales desde hace más de 100 días. Por lo tanto, es completamente injusto pagar un derecho para trabajar, pero que al mismo tiempo están prohibiendo hacerlo”.
Agregan desde el sector que actualmente los ingresos de muchos locales están en cero, por lo tanto cobrar este tipo de gravámenes no se justifica y sólo profundiza la compleja situación en la que se encuentra el sector debido a la paralización de la actividad.