Una de las consecuencias que se generó desde que comenzó la pandemia en 2020, fue el cierre los centros de rehabilitación durante ese año, dejando a un número considerable de personas sin tener la posibilidad de seguir su tratamiento, lo que los puede llevar a complicaciones mayores en su salud, pudiendo llegar incluso a la atrofia severa. Sin embargo, alternativas como la telerehabilitación permitió que los usuarios pudieran continuar con su terapia sin arriesgarse a salir de sus casas, y en el Día Mundial de Rehabilitación, se destaca la importancia de las nuevas tecnologías y cómo ayuda en la recuperación de los usuarios que requieren de ella.
Instaurada por la OMS, cada 23 de marzo se celebra esta fecha a nivel mundial con el objetivo de resaltar la necesidad y el derecho que tienen las personas con discapacidad de poder acceder a tecnologías eficaces para su diagnóstico y tratamiento.
Según sus propias fuentes, más de 1000 millones de personas padece algún tipo de discapacidad, cifra que representa alrededor del 15% de la población a nivel mundial, donde entre 110 a 190 millones de personas tienen grandes dificultades para funcionar, y las tasas de personas con esta condición están aumentando a causa del envejecimiento de la población y del aumento de las enfermedades crónicas a nivel mundial.
Dentro de las tecnologías que permite un tratamiento de telerehabilitación se encuentra TRAINFES, innovador sistema de neurorehabilitación que permite que las personas se conecten a través de un dispositivo electrónico controlado por una aplicación que puede ser utilizada fácilmente por el usuario. Esta alternativa, además ofrece el monitoreo constante del completo equipo de profesionales que son parte del centro de rehabilitación: médicos fisiatras, kinesiólogos, fonoaudiólogos y psicólogos; quiénes están conectados permanentemente para ayudar a los usuarios de forma remota.
Este sistema es de fácil manejo para los usuarios y permite que las personas puedan continuar con su rehabilitación desde sus hogares, gracias a que el dispositivo puede ser controlado desde un smartphone, convirtiéndose en una excelente alternativa para aquellas personas que hoy tienen sus centros de rehabilitación cerrados y no pueden continuar con su tratamiento.
“La pandemia nos ha afectado a todos y esta efeméride nos permite visibilizar la difícil realidad de muchas personas alrededor del mundo que no pueden acceder a las prestaciones de salud que necesitan para su rehabilitación”, comentó Luis Campos, kinesiólogo y fundador de TRAINFES.
Tan solo en Chile hay 340 mil personas diagnosticadas con algún tipo de daño neurológico y TRAINFES desde sus inicios en 2013 a la fecha, han rehabilitado más de 2.000 usuarios. Además de estar presente con su tecnología en más de 50 hospitales y clínicas relevantes del país con su innovadora tecnología que ahora permite que más personas puedan acceder a la telerehabilitación durante esta emergencia.
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