Ayer domingo, el Presidente Sebastián Piñera anunció un proyecto del Gobierno que permitiría un tercer retiro del 10% de los fondos previsionales, el que ha sido fuertemente criticado por la oposición.
La iniciativa propone un nuevo retiro de fondos de pensiones con un 2% de cotización adicional, que llegaría directamente a las AFP a través de la cuenta individual de los cotizantes, y estaría conformado por un 1% con cargo al empleador, y otro 1% como aporte directo del Estado. Adicionalmente incluiría un bono de $200 mil para los cotizantes que ya no tienen saldo que retirar.
Una de las principales críticas viene desde los gremios de Micro, Pequeña y Mediana Empresas y trabajadores por cuenta propia (Mipymes).
Consultada al respecto, Gianina Figueroa, secretaria general de la Unapyme, señaló a Agencia Uno que “financiar el retiro de fondos de pensiones con un impuesto a las Mipymes es regresivo, elude la responsabilidad del Estado y descarga el costo de la crisis sobre los más débiles”.
Según explica la dirigente gremial, “el impuesto del 1% recaerá sobre el millón trescientas mil (Mipymes), encareciendo sus costos y, en muchos casos, dejándoles fuera de mercado”, agregando que “el impacto en las grandes empresas será marginal, pues son sólo 14.000, pero poseen el 87% de las ventas y utilidades totales para hacer frente a esto”.
“¿Por qué no se les cobra a las grandes empresas un impuesto del 2%, a objeto de reponer parcialmente los fondos retirados desde las AFP y así se permite a las Mipymes tener un respiro y recuperarse?, planteó Figueroa.
Asimismo, aseguró que “más de 300 mil (Mipymes) ya cerraron sus puertas, la gran mayoría de las que aún sobreviven, están haciendo frente a los embargos de tesorería, las deudas de cotizaciones de trabajadores acogidos a AFC, de patentes municipales, arriendos, deudas con proveedores, servicios básicos, iva y un largo etcétera”.
Consultada por el efecto de los paquetes de ayuda para el sector impulsados por el Gobierno, la dirigente gremial es enfática en señalar que “todos los instrumentos del proyecto de ley de reactivación económica beneficiaron, en su gran mayoría, a empresas con ventas de hasta un millón de UF (grandes empresas), y para las Mipymes solo migajas, que no lograron parar la operación y hoy ya no resisten más”.
Señaló además que los gremios una vez más han sido excluidos de esta discusión. “Es impresentable que se tome una decisión que nos afecta e involucra, sin al menos consultarnos. Este gobierno mete la mano al escuálido bolsillo de la Mipyme sin pudor”, añadió.