Este martes la Asociación Nacional de Importadores de Motocicletas (Anim) reveló que la industria de ha vendido en el 2021 un total de 47.473 motos en Chile, cifra que significa un 74% más que en el año anterior.
En ese sentido, Justo Verdejo, subgerente de Lubricantes Shell, entrega una serie de consejos que permitirán alargar la vida útil de este tipo de vehículos, procurando además que funcionamiento de estos se mantenga siempre en un nivel óptimo.
Al respecto indicó que un factor vital para garantizar que la máquina se mantenga en un estado operativo ideal, es el lubricante.
“Es un elemento imprescindible para la protección contra el desgaste, mantención de rendimiento del motor y la limpieza de los pistones”, afirma.
1. No todos los embragues son iguales:
“La mayoría de las motos cuenta con sistemas de embragues húmedos que requieren un lubricante con una formulación específica y/o distinta a los embragues tradiciones o secos (similar a los utilizados en automóviles)”, señala el experto.
En la misma línea Verdejo además remarca que “estos aditivos buscan evitar que el embrague patine o resbale y que el mismo aceite proteja la transmisión, logrando un recorrido de calidad sin desgastar los componentes”.
2. Revise el nivel de aceite del motor:
“Si el motor está en buen estado, gastará muy poco aceite entre un cambio y el siguiente. Sin embargo, es muy importante comprobar que el nivel del aceite no baje de la marca mínima.
3. ¿Cuándo realizar el cambio de aceite?
Debido a la alta exigencia que tienen los lubricantes para motocicletas, Verdejo remarca que “es fundamental cambiarlo regularmente, con el fin de que se encuentre en óptimas condiciones”.
“La recomendación es utilizar el tipo de lubricante recomendado para el motor de la moto. El aceite del motor debe presentar cualidades anti-desgaste, anti-corrosión y anti-herrumbre“, sostiene el subgerente
“Los aditivos detergentes del aceite, también, deben permanecer inalterados con la temperatura, evitando la formación de depósitos dentro del motor”, agrega.
4. Cadena lubricada y nunca suelta:
“La mayoría de las motocicletas tienen transmisión por cadena a la rueda trasera. Esta debe estar bien lubricada y no tener demasiada holgura. La cadena se revisa y lubrica durante cada revisión de la motocicleta para su buen funcionamiento”, explica.