La diversidad en el lugar de trabajo se ha convertido en un pilar fundamental para el éxito sostenible de las organizaciones. Reconociendo esta necesidad, empresas de todo el mundo están adoptando una nueva visión que abraza las diferencias en términos de generación, género y otros factores entre sus colaboradores.
Según la revista “Reflexión: Guía práctica para los desafíos en la gestión de personas” de Pluxee Chile, desde los Xennials (entre 1977 y 1983) y los Millennials (entre 1983 y 1995) hasta los Centennials o también conocidos como generación Z (entre 1994 y 2004), cada grupo generacional trae consigo habilidades únicas y una visión del mundo que puede enriquecer significativamente la cultura organizacional.
En este sentido, el liderazgo desempeña un papel crucial en la adaptación de las empresas a las expectativas y necesidades de cada uno de estos perfiles.
Generación Z y los Millennials en las empresas
El Estudio Radiografía del Trabajador en Chile 2022, que encuestó a 35.000 trabajadores en 34 mercados, descubrió que la Generación Z y los Millennials están impulsando una revolución en la dinámica empleado-empleador.
El 52% de los Millennials y el 48% de la Generación Z afirman haber renunciado a un trabajo porque no encajaba con su vida personal.
De igual manera, el 53% de ambas generaciones estarían dispuestos a renunciar si su trabajo interfiriera con su disfrute de la vida. Además, el 57% de la Generación Z y el 50% de los Millennials, afirman que rechazarían ofertas laborales que no estén alineadas con sus valores sociales y ambientales.
Existe una necesidad de conciliar las expectativas y necesidades de los Millennials y Centennials con las de generaciones previas. Mientras que los jóvenes tienden a priorizar un balance entre trabajo y vida personal, así como un propósito profundo en su carrera, las generaciones mayores suelen valorar la estabilidad laboral y la fidelidad a largo plazo.
“El panorama laboral está experimentando una transformación sin precedentes, impulsada en gran medida por la tecnología y los cambios socioculturales”, comenta Francisco Droguett, director de marketing de Pluxee Chile.
Asimismo, destacó, que “es vital que los líderes comprendan y aborden estas diferencias generacionales de manera proactiva para crear entornos donde todas las voces sean valoradas y todas las necesidades puedan ser atendidas”.
¿Cuáles son sus diferencias?
Diferentes rangos etarios, costumbres y creencias. La primera edición de la revista Reflexión señala que, tanto los Millennials como los Centennials priorizan la flexibilidad laboral. Inclusive, las empresas hoy en día han tenido que adaptarse a estas formas de trabajo, incluyendo políticas que integren modalidades presenciales y remotas.
Por otro lado, los Centennials muestran una inclinación hacia el trabajo individual que aporta al colectivo, surgiendo una necesidad de potenciar la colaboración asíncrona, es decir, trabajar juntos fuera de línea, no necesariamente de manera simultánea.
Para las generaciones anteriores, como los Xennials el trabajo lo era todo y administraban a la perfección sus tiempos. Sin embargo, pese a no ser nativos digitales, han logrado adaptarse a las nuevas tecnologías.
En última instancia, la diversidad generacional y de género no solo es una cuestión de responsabilidad social corporativa, sino también una estrategia inteligente para impulsar la innovación, la creatividad y el rendimiento empresarial. Las empresas que abrazan esta diversidad están mejor posicionadas para prosperar en un mundo empresarial cada vez más complejo y globalizado.
