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Ayer jueves personal del OS-9 de Carabineros detuvo a cinco personas por las amenazas que sufrió el gerente de Seguridad de Azul Azul, Felipe De Pablo, el pasado 20 de agosto en la casa de sus padres, en la comuna de Puente Alto.

Esta mañana, la fiscal a cargo del caso, Lorena Herrera, precisó que todos pasarán a control de detención en el Juzgado de Garantía de la señalada comuna, en donde serán formalizados por los delitos de amenazas y daños calificados.

En la misma línea, explicó que la víctima solicitó la medida cautelar de que a los imputados se les prohíba acercarse a su domicilio, el de sus padres o a recintos deportivos, como el estadio en donde Universidad de Chile ejerza como local en próximos partidos y el Centro Deportivo Azul.

No obstante, la persecutora aclaró que solicitarán al tribunal la prisión preventiva para los cinco detenidos, por considerarlos un peligro para la sociedad.

La fiscal Herrera confirmó que tras las investigaciones pertinentes, se logró identificar a estas personas como hinchas o simpatizantes de la “U”, quienes tras ser detenidos ayer en sus domicilios, hicieron uso de su derecho a guardar silencio.

Estos sospechosos arriesgan una pena de 61 a 540 días de presidio por el delito de amenazas, y de 1 año y medio a 5 años por el de daños calificados.

La representante del Ministerio Público explicó que el testimonio de vecinos y testigos fue clave para poder acreditar la participación de los detenidos en estos ilícitos.

Finalmente, aclaró que De Pablo y sus padres permanecen con medidas de protección por parte de Carabineros, y que no se puede descartar que en el futuro se acredite la participación de otras personas en los ilícitos que están siendo investigados.

Agencia Uno 

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