Los recientes hechos de violencia en los estadios chilenos ocurridos durante las últimas tres semanas tienen en vilo y preocupados no sólo a los dirigentes de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), sino que también a su par colombiano.
La entidad cafetalera ya planifica la logística para el duelo del 31 de marzo ante Chile, válido por la segunda fecha de las Clasificatorias rumbo a Qatar 2022, y que seguramente albergue el Estadio Nacional en lo que podría ser un posible escenario de manifestaciones y cánticos dada la crisis política-social. Ramón Jesurun, presidente de la FCF, conversó con La Cuarta y manifestó sus inquietudes.
“Acá hay que cumplir el calendario que nos pone la FIFA, nada más. Y en ese sentido la garantía de la seguridad en los partidos corresponde a todos los locales. En el caso específico del partido del 31 de marzo, el responsable es Chile. Yo personalmente, estoy en contacto permanente con Sebastián Moreno, así como con otros presidentes de federaciones“, dijo.
“Sabemos todo lo que está ocurriendo en este momento en Chile, pero son temas espinosos a los cuales no nos gustaría referirnos”, complementó.
Alfredo Asfura, ex comisario de la FIFA, detalló los posibles castigos para Chile en caso de que algo altere la realización de los cruces. “De ocurrir algún incidente grave, las sanciones pueden llegar incluso a perder la localía en otros duelos“, ratificó al medio citado.