Una situación escandalosa tuvo lugar en el empate sin goles entre Racing de Avellaneda y Boca Juniors. Durante el entretiempo del partido, dos jugadores xeneizes llegaron a los golpes en el camarín y debieron ser separados por la policía.
Se trata de Carlos Zambrano y Darío Benedetto. De acuerdo a la información del diario Olé, el defensor peruano y el atacante argentino se fueron a las manos durante el descanso del partido. Según detalló el citado medio, el Pipa le dijo al zaguero: “Dale boludo, yo te mato. Si nosotros estamos mirando cuando tiran los centros nos van a hacer un gol”.
Ambos jugadores se fueron a los vestuarios con la tensión a tope y al regresar, Zambrano apareció con el rostro hinchado y con algunas heridas alrededor de su ojo izquierdo. Benedetto, en tanto, apareció en el complemento con rasguños en la zona del cuello, algo que no tenía en el primer tiempo.
Según reveló Olé, la policía debió intervenir y separar a ambos futbolistas. Lo propio hicieron el resto de los jugadores de Boca Juniors para que la situación no pasara a mayores.
Desde el elenco xeneize no se dieron detalles de lo ocurrido, aunque confirmaron que hubo un cruce en el camarín. “Hubo una discusión, nada más que eso. Después te puedo hablar del partido. No tengo la menor idea de qué pasó, lo voy a charlar”, dijo el entrenador interino del equipo, Hugo Ibarra.
Por último, al ser consultado por las heridas de Zambrano, el estratega sostuvo que “no tengo ni idea. Se jugó 90 minutos, pudo haber sucedido algo en el partido. Sé que hubo una discusión y nada más. Un plantel necesita discusiones para mejorar”.