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Rubilio Castillo
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El hincha del fútbol pasa por miles de emociones tras el resultado de un partido, pero nada justifica lo que ocurrió en Bolivia. Y es que tras el empate entre el Royal Pari ante el Atlético Palmaflor, hinchas del equipo local esperaron a los jugadores en la salida y los enfrentaron muy molestos. La situación fue tal, que con uno de los jugadores se ensañaron y lo golpearon. 

El jugador afectado fue Rubilio Castillo, quien mientras se dirigía a su auto fue interceptado por un grupo de hinchas, los cuales lo insultaron y agredieron con golpes de puño. El futbolista reaccionó y se defendió de la misma forma, lo que generó una pelea aún mayor entre los que defendían al jugador y quienes los atacaban. Luego de unos minutos, la policía llegó y detuvo el incidente.

¿Lo peor? ¡El jugador agredido ni siquiera participó del partido!

Ante estos lamentables hechos, Castillo, que es uno de los goleadores de su equipo, no se ha pronunciado por el hecho. Mientras que el club emitió un comunicado condenando el suceso en las afueras del estadio Ramón Aguilera Costas.

“Desde el club expresamos nuestro inconformismo por los hechos ocurridos después del partido del plantel profesional y expresamos nuestro rechazo ante cualquier forma de violencia y agresión. El fútbol no puede ser una excusa para agredir a otra persona, sin importar si es jugador, directivo, hincha o miembro del cuerpo técnico”, indicaron en el texto.

Además agregaron que “el nombre de toda una hinchada y de una institución se ve mancillada por este tipo de actos tan reprochables. Hay muchas formas de mostrar el inconformismo sin recurrir a la violencia”.

Finalmente la institución concluyó: “Invitamos a todos nuestros aficionados a vivir el fútbol en paz, en familia, y esperamos que actos como los ocurridos en el día de ayer no se vuelvan a presentar”.

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