El ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, conversó con La Mañana Interactiva de Radio Agricultura sobre el proyecto de ley de teletrabajo, que ya se encuentra en su segundo trámite legislativo en el Senado.
“Hay mucha incertidumbre, cautela, por parte de las empresas para impulsar el teletrabajo”, dijo el ministro, enfatizando que la idea es poder compatibilizar mejor la vida laboral con la personal. Por ejemplo, considera que es un despropósito que se use hora y media del día en el trasporte público.
El proyecto considera que el teletrabajo “cuando los servicios sean prestados mediante la utilización de medios tecnológicos, informáticos o de telecomunicaciones, o bien cuando los servicios prestados deban reportarse mediante tales medios”.
Para el secretario de Estado, uno de los problemas para aprobar esta iniciativa es la izquierda. “Allí surge gente de izquierda que (dice) que el teletrabajo -la flexibilidad- es precariedad laboral. Todo lo contrario”. Según él, “el teletrabajo es humanidad, es calidad de vida”.
“Donde mejor funciona el teletrabjo es donde se ha construido una relación de confianza y respeto a las normas laborales. Nadie va encargar un trabajo para hacerlo a distancia si no confió en el trabajador y tampoco nadie va aceptar un jefe si desconfió en él porque voy asumir que quiere precarizar el empleo”, dijo Monckeberg.
Sobre sus declaraciones en una entrevista con La Tercera, donde manifestó que “el pinochetismo es parte del pasado”, el ministro aclaró que “no nos eligieron para resscribir el pasado, sino que para escribir y cambiar el futuro. Por eso la obsesión que debe movernos a todos los partidos de la coalición y todo el país, es una obsesión por el futuro. En eso si nos jugamos el desarrollo”.
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