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Con un creciente interés por consumir alimentos más saludables y una producción local que no alcanza a abastecer la demanda, se estima que existen oportunidades para productos como las almendras y nueces.

La tendencia por llevar una vida saludable y hábitos de alimentación sana sigue al alza entre los europeos, e impacta en el consumo de productos como los snacks y los frutos secos, que se espera sigan teniendo una demanda atractiva a futuro.

Además, la Unión Europea es una región donde los frutos secos se utilizan como ingredientes de otros alimentos, como chocolates y dulces tradicionales -como el turrón y el mazapán en España-, en el caso de las almendras, aunque también como parte de helados y confites, si se habla de nueces y pistachos.

A eso se suma que, según un reciente informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) -para el cual la Unión Europea es el principal destino de sus exportaciones de frutos secos, con alrededor del 32% del mercado-, se están buscando nuevas alternativas de consumo.

“La industria de los snacks está haciendo esfuerzos para ofrecer nuevos productos a los consumidores y nuevas formas de consumir los frutos secos”, indica, aunque advierte que no es una tarea fácil, sobre todo en los mercados tradicionales, como España e Italia, porque las personas siguen prefiriendo los productos más familiares.

Por ello la estrategia de la industria para elevar el consumo de frutos secos entre los europeos, más que en el volumen se está enfocando en potenciar los beneficios para la salud que tienen a través de campañas publicitarias y los envases de los productos.

Cómo viene la producción

La UE es uno de los mayores productores y consumidores de almendras en el mundo. Para la temporada 2018-2019 se estima que solo España e Italia producirán unas 100 mil toneladas con cáscara, a lo que normalmente suman más de 273 mil toneladas en importaciones, según datos de la campaña 2016-2017, donde Chile es el quinto proveedor, con solo 627 toneladas.

En cuanto a las nueces, donde destacan los franceses entre los principales productores, se espera una recuperación para esta cosecha gracias a mejores condiciones climáticas, luego de una caída de 17% que tuvieron el año pasado.

En Rumania, en tanto, luego de obtener una cosecha récord en 2017, para este año se espera una buena producción de nueces, que se ubicaría en torno al promedio de los últimos cinco años y no sería una producción histórica como la del año pasado.

“La gran brecha entre la producción europea de nueces y las importaciones ofrece excelentes oportunidades para los exportadores de nueces”, resalta el informe del USDA.

Los pistachos también son un fruto seco atractivo para los europeos, cuya producción no es suficiente para abastecer la demanda local, por lo que deben importar desde Irán -que concentra alrededor del 90% de los envíos a la UE- y EE.UU., además de proveedores secundarios, como Argentina, que se ubica en el tercer lugar.

273 MIL TONELADAS de almendras importó la UE en la campaña 2016-2017,donde Chile ocupa el quinto puesto.

36.918 TONELADAS de nueces envió Chile a la UE en la temporada 2016-2017, ubicándose como el segundo proveedor.

Fuente: Revista del Campo

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