Envíos De Vino
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Brasil fue uno de los mercados que se estancaron durante la segunda mitad de 2021 debido a la desaceleración en el consumo y el sobrestock.
Los problemas en la cadena logística a nivel global siguen afectando los envíos de vino, los cuales han seguido al alza, pero con un crecimiento más moderado. Según las últimas cifras de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), a noviembre los embarques de vino embotellado totalizaron US$ 1.363 millones, un 4,8% más que en el mismo período del año pasado. Mientras que en volumen, en el lapso enero-noviembre, acumulan una baja de 2,4%, con embarques por 405,7 millones de litros. ‘La falta de contenedores y la escasez de insumos están retrasando las exportaciones y entorpeciendo la concreción de la vigorosa recuperación que se observa en la demanda por nuestros vinos’, dijo la directora comercial de Vinos de Chile, Angélica Valenzuela. Sin embargo, destacó que en lo que va de 2021 se observa un crecimiento de 7,3% en el precio de exportación. ‘Lo que se explica, en parte, por crecimientos en los segmentos superiores de precio, segmentos foco de la estrategia de Vinos de Chile’, afirmó.

Respecto a los mercados de exportación, China se posiciona como el principal destino del vino nacional con envíos por US$ 226 millones, registrando un avance de 39% respecto a igual lapso de 2020. ‘China mantiene el dinamismo y presenta cifras positivas tanto en volumen como valor. Se espera que este mercado termine el año con un crecimiento de 31% en volumen y 36% en valor. Lo más relevante para los próximos meses será el comportamiento del virus en China previo al Año Nuevo chino que se celebra la primera semana de febrero’, explicó.

Por otro lado, Valenzuela recalcó que en los últimos meses de 2021 diferentes viñas chilenas han firmado acuerdos relevantes con importadores locales, lo que, según ella, debiese impactar positivamente en sus ventas futuras y construcción de marca.

En segundo lugar, aparece Brasil, que luego de un par de meses de un muy buen desempeño se ha ido estancando. En el período enero-noviembre las exportaciones a ese país no marcaron variación respecto al mismo lapso de 2020, con US$ 166 millones. ‘En los últimos meses el mercado de Brasil ha sufrido cambios importantes, el consumo de vino se ha desacelerado con el regreso de las personas a sus rutinas normales. Los importadores enfrentan problemas significativos debido a los mayores costos logísticos, además de los incrementos del precio del vino debido a la caída de la cosecha en Europa y la falta de insumos, principalmente en Sudamérica’, dijo Valenzuela.

La directora comercial de Vinos de Chile agregó que estas condiciones se dan en un contexto en que los importadores se prepararon para el crecimiento del mercado y aprovecharon la mejora momentánea en el tipo de cambio, lo que generó un sobrestock de productos y, por lo tanto, una reducción de la importación en los últimos meses.

Mas atrás aparece Reino Unido con embarques por US$ 148 millones, un 3% más que en enero-noviembre de 2020, y luego Estados Unidos, con un alza de 6% y US$ 102 millones.

Perspectivas para este año

Desde el sector vitivinícola siguen de cerca el avance de la variante del covid Ómicron y los efectos que pueda tener en los mercados internacionales en los próximos meses. ‘Los cierres de mercado afectan principalmente al consumo fuera del hogar, al canal on trade (restaurantes, pubs y hoteles), canal que estuvo muy disminuido el último año y medio y que estaba empezando a recuperarse. A su vez, no nos permiten realizar actividades presenciales de promoción, de imagen y de educación, y nos imposibilitan viajar a los mercados de destino’, señaló Angélica Valenzuela.

A su vez, dijo que la pandemia ha impuesto importantes desafíos al sector, los que se han mantenido a lo largo de estos casi dos años de crisis sanitaria. ‘Entre estos se puede destacar la disrupción en la cadena logística en términos de disponibilidad de contenedores, incremento en tarifas marítimas, congestión y demoras en puertos, escasez de transportistas, entre otros’, dijo.

Para este 2022, Valenzuela manifestó que es difícil hacer proyecciones; sin embargo, en la actual situación se ven buenas perspectivas.

‘Esperamos poder retomar de manera más frecuente las actividades presenciales en los principales mercados de exportación del vino chileno, la participación en ferias internacionales y retomar los viajes al mercado. El on trade debiese continuar su recuperación de actividad. Debiésemos esperar, a su vez, que en la medida que los mercados se mantengan abiertos se empiece a regularizar la falta de contenedores y la escasez de insumos’, aseguró.

Fuente: El Mercurio

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